lunes, 13 de abril de 2009

A la Sombra de la Montaña Pálida

Las altas tierras noroeste de Katapesh forman una natural barrera entre el corazón de la nación y sus vecinos, Osirion al norte y la Extensión Mwangi al oeste. Los Picos Cínicos también también impiden gran parte de las lluvias occidentales que hace tan exhuberante la Extensión Mwangi, atrapandolas en lagos de montaña y picos cubiertos de nieve que solo se desliza hacia abajo a través de agrestes cañones durante la primavera deshielandose y cruzando las secas llanuras y praderas.
Las tierras altas son un lugar muchos más salvaje que las grandes ciudades de la costa, una tierra fronteriza habitada por gente dura que subsiste de la tierra, a menudo cerca de fuentes de agua que permiten la vida. También es una región repleta de paramos indómitos y criaturas salvajes, de las cuales no lo son menos las bárbaras tribus de gnoll que habitan en los picos. Las leyes de Katapesh, tal como son, se aplican por igual en las tierras altas, pero el alcance de los misteriosos señores de la nación raramente se extiende tan lejos. Por ello la gente de las tierras altas están acostumbrados a ocuparse de sus propios problemas, y esperan estar totalmente solos cuando surjan. Del mismo modo, están acostumbrados ser abandonados y labrarse su propio camino, siendo independientes hasta el punto de la obstinación.
Descritas a continuación hay una cantidad de localizaciones halladas en las proximidades de la Montaña Pálida, profundo en las Tierras Altas Uwaga, como una exploración de las bestias que hacen de estas traicionaeras extensiones su hogar.

ENCICLOPEDIA DE LAS ALTAS TIERRAS
Aunque la Montaña Pálida destaca sobre sus contornos tanto en altura como infamía, las tierras alrededor de la fantasmal aguja poseen peligros y maravillas totalmente propias. Señalas a continuación hay unas de las localizaciones mejor conocidas a pocos días de viaje de Kelmarane y de la Montaña Pálida.
Gancho Bronce [Bronze Hook, 19 en el mapa]: Este pueblo comercial asentanto en las estribaciones de los Picos Cínicos una vez se encontraba en la ruta de caravanas que iba desde Ipeq a Solku en el sur, y obteniendo una saludable vida transportando bienes y pasajeros a través del Río Pálido, cargando peajes por el uso del Puente del Vado Gancho. Como la ruta comercial ha caido en desuso, así las fortunas de Gancho Bronce también han descendido. El pueblo subsiste del poco goteante comercio de la antigua carretera, pero los tiempos desesperados necesitan medidas desesperadas, así que Gancho Bronce cada vez más no hace preguntas sobre el "comercio" que pasa a través del pueblo o a través (o a lo largo) del río. La polícia es presionada para mantener el orden en el pubelo siempre que una sustancial cantidad de visitantes pasan a través, llevando con ellos monedas y oportunidades para beber y pelear en las cervecerías locales. De todas formas, que las autoridades a menudo están dispuestas a dejarse sobornar y más probeblamente ser halladas comenzando peleas en lugar de impidéndoles no ayuda mucho.
Los Acantilados Grises [The Chalk Cliffs, 12 en el mapa]: Un profundo cañón encajonado cerca del nacimiento de las Cataratas Martillo, cortado por antiguos cursos de agua y siglos de vientos. La pálida piedra presenta solo duras plantas de monte bajo capaces de trepar y excavar en las pequeñas hendeduras y grietas buscando el agua de lluvia recogida. Los Acantilados Grises también están oradados por pequeñas cuevas y aberturas, ahora hogar para una bandada de gárgolas de piel pálida, sus pieles grises confundiéndose con el color de los acantilados. Las gárgolas cazan en las montañas circundantes y anidan en los lugares altos de los acantilados, accesibles solo por antiguos, usados senderos quizás una vez utilizados por los enanos de las montañas. Hay algunas pruebas de que los enanos de las Cataratas Martillo una vez usaron de cantera los Acantilados Grises, y quizás excavaron otras minas, ahora utilizadas como guaridas por las gárgolas y otras criaturas.
Los Pasos del Gigante [The Giant's Steps, 17 en el mapa]: Los dos pequeños lagos de agua dulce a ambos lado de la antigua ruta comercial llegaron a conocerse como los "Pasos del Gigante" por su parecido a un par de huellas en el suelo de fango, llenas de agua. Diversas leyendas locales reivindican que realmente fueron hechas por un gigante o un titán en eras pasadas, y su agua es especialmente poderosa por ello. Todo lo que cualquier sabe ahora es que los Pasos son algunos de los primeros alivios que las caravanas Osirianas que se dirigen al sur encuentran nada más entrar en las tierras altas. De hecho, es así como llegaron a ser apodadas como la "Pisada Izquierda" y la "Pisada Derecha", como si el gigantes estuviera andando sur-surese (y donde excepto de Osirion tal coloso podría ser originario, pensaron los que pusieron el apodo). Los lagos aún sirven como fuente de agua para la ocasional caravana o grupo de comerciantes y viajeros, pero igual que el abrevadero en la sabana atraea predadores en espera de presas, así los Pasos se han convertido en un lugar favorito para bandoleros y bandidos para embosca a los incautos. Los viajeros cada vez más han hallado las claras aguas de los lagos ensuciadas con cuerpos tirados, y ninguna de las lejanas ciudades de Katapesh puede ser molestadas para tratar con la amenaza, especialmente desde que aún no ha supuesto un serio peligro para el comercio de la región (mejos que la guerra y los rumores de guerra, indudablemente). Las historias de taberna en Gancho Bronce y Tres Colinas hablan de tesoros enterrados a lo largo de las orillas de los Pasos del Gigante, o incluso ocultos en las profunidades de los lagos mimsos, pero pocos son los suficientemente esúpidos como para ir a ver, especialmente si se paran a preguntarse si tales historias son extendidas por alguien esta cebando el gancho para obtener más presas.
Las Cataratas Martillo [The Hammerfalls, 14 en el mapa]: Las Cataratas Martillo, alimentadas por la nieve derretida en los alto de los Picos Cínicos, caen en cascadas desde las montañas, rugiendo entre los altos acantilados y bramando a lo largo de desnivelados rápidos hacia el Río Pálido, donde las remolinantes aguas blancas se calman un poco antes de fluir pasado Kelmarane y las abiertas llanuras. El lejando rugido de las caaratas es audible día y noche en los cercanos pasos y cañones, y los rápidos son imposibles de navegar en barca, excepto por los extremadamente pequeñas y diestras balsas; incluso entonces, son necesarios frecuentes pertigas para eviar las cataratas y las dentadas rocas capaces de desgarrar cascos y carne con igual facilidad.
La mayor de las cascadas es conocida como el Yunque, cerca del nacimiento del río en lo profundo de las montañas, saltando más de 150 pies hacia un amplio estanque debajo. Hace tiempo, la pared de roca detras y alrededor del Yunque estaba acribillada de cuevas naturales desgastadas por milenios de agua, expandidas y agrandadas por enanos mamposteros. De la comunidad de enanos de Catarata Martillo no se ha oido nada desde hace más de un siglo, haciendo de ellos una leyenda total para las razas de corta vida de las tierras altas. Muchas historias intentan explicar su destino, ya sea sucumbiendo a una dolencia misteriosa o muriendo por las espadas de los crueles gnoll. Quizás excavaron demasiado profundo, y golperaon algo distinto a una veta de mineral, chocando con los peligros de las Tierras Oscuras.
Los Salones de la Catarata Martillo han permanecido perdidos y sellados durante generaciones, y nadie puede reclamar haberlos hallados o hallar sus tesoros. En sus brindis, los viejos enanos de Katapesh hablan con nostaligia de las maravillas de los talleres Catarata Martillo, con forjas y puertas alimentadas por corrientes de agua, y de las ricas vetas en las raices de las montañas. También lamentan su perdida y relatan historias de como los enanos moribundos construyeron sus propias asturas tumbas en las profundidades de la roca, llenándolas con trampas y defensas mecánicas, para que así los salvajes humanoides de los picos nunca las profanarían. De ven en cuando, un atrevido buscador se jactan de mapas que muestran una oculta senda o entrada secreta, o incluso reivindica que ha estado allí y ha vuelto, quizás con un pequeña chuchería para demostrar la historia, pero si alguien verdaderamente ha encontrado los antiguos salones enanso o ha descubierto su destino, afortundamente se lo han guardado para ellos.
Vado Gancho [Hook Ford, 20 en el mapa]: Aunque el curso del Río Pálido pasando las estribaciones de los Picos Cínicos en ninguna parte es tan vigoroso como las cáscadas y los rápidos río arriba, sigue siendo frío y profundo, con pocos lugares para vadearlo o cruzarlo. Vado Gancho, cerca del pueblo Gancho Bronce, es el único punto poco profundo de todo el rio duranta millas, situado en una zona donde el río frena a medida que serpentea por todas las llanuras hacie el oeste. Los peajes recaudados de las caravanas que cruzan de norte a sur a lo largo de la antigua ruta comercial una vez trajero riqueza importante al pueblo cercano, pero estos dineros se han secado desde el la vieja ruta comercial ha caido en desuso. Sin embargo, las torres de guardia que protegen el vado siguen en pie, y los bajíos aún ven cierto uso ocasional por parte de viajeros que realizan su trayecto a lo largo de las tierras altas. Dasharn, el veterano guardia que ha estado vigilando el vado durante más de 40 años, aún sigue en su puesto. Un honrado pero perpetuamente aburrido hombre, pregunta exhaustivamente a cualquier que haga uso de "su" vado. También ha realizado un contacto pacífico con los peligrosos dregones que viven en las colinas cercanas, y cuando puede deja los cuerpos de las gacelas recientemente cazadas sobre un afloramiento de piedra rio arriba de su hogar.
La Casa de la Bestia [The House of the Beast, 8 en el mapa]: Descansando a la sombra de la Montaña Pálida, la Casa de la Bestia, descrita en Pathfinder #20, "La Casa de la Bestia".
Iemos [Iemos, 16 en el mapa]: Una pequeña llanura de alta, suave hierba en medio de las polvorientas colinas de los Picos Cínicos, Iemos es el nombre tanto del pasto y de la alta palmera de 40 pies que se alza en el corazón de la llanura. Se dice que aqui es donde el héroe Jonnaphar Ahallt cayó tras matar a la sierpe azul Daghov, y que la palmera surgió del cuerpo del mata dragones. Aquellos con la capacidad de hablar con las plantas encuentra a la palmera más que deseosa de conversar. Iemos comparte el mismo corazón noble que el héroe Jonnaphar y busca proteger a todas las criaturas pacíficas que descansen cerca. Lo hace animando la hierba en azotantes vides y controaldo el clima para ahuyentar a cualquier criatura que perciba como un enemigo.
El Estómago del Chacal [The Jackal's Maw, 15 en el mapa]: Aunque los Picos Cínicos están repletos de profundos cañones y griestas, el Estómago del Chacal les hace parecer a todos poco más que surcos. Es una profunda sima con lados verticlaes, algunos dice ser virtualmente sin fondo. En verdad, el fondo del Estómago -por ello es- descansa en las Tierras Oscuras. Senderos ocultos cortados en las caras de los acantilados por manos inhumanas hace mucho tiempo proporcionan un acceso secreto a las profundidades del Estómago, permitiendo furtivas incursiones de las Tierras Oscuras en la superficie.
Las tribus gnoll de los picos consideran el Estómago sagrado para la Madre de los Monstruos, vinculandolo tanto a su boca como a su étero, consumiendo y engendrando terribles criaturas provenientes de las terribles tierras inferiores. Los sacrificios y ofrendas a veces son lanzados al Estómago en nombre de la diosa, pero los gnoll no se aventuran más allá como no lo harían en la guarida de un león. Las cuentos hablan de las ofrendas de incontables años alfombrando el suelo de la sima con sus huesos, dejados limpios por los basureros de la oscuridad, y mezclados con brillantes moendas, joyas y otras baratijas. Los suficientemente temerarios como para buscar fortuna en las profundidades casi nunca han regresado para contarlo, los pocos que si marcados mentalmente, fisicamente o ambos por los horrores de abajo.
Kelmarane [Kelmarane, 18 en el mapa]: El pueblo de Kelmarane esta detallado a lo largo de todo el Pathfinder #19, "el Aullido del Rey Carroñero" y para avitar spoilers, se deja sin describir.
Valle Litha [Litha Vale, 3 en el mapa]: Al oeste de la Montaña Pálida, el Cañón de la Serpiente se abre paso a través de los Picos Cínicos. Los viajeros que se desvían de la senda principal del cañon se encuentran surgiendo a un extraño reino silencioso de altisimos arboles grises con hojas y hierbas translucidas que crujen curiosamente bajo los pies. Tras un mayor examen, los árboles, planteas y todas las cosas vidas del valle están formadas por la misma piedra parecida a la pizarra, y la delgada, translucida piedra suelta cierto sonido como el tintineo de débiles campanas en la extraña brisa.
Una vez, el valle era exhuberante y estaba repleto de vida. Una pequeña secta de druidas lo atendía así como los valles circundantes, protegiendo su encargo de la explotación exterior. Una bella y dotada sacerdotisa druida llamada Orlaas de volvió demasiado obsesionada con blindar el valle. Alcnazó importancia dentro de su secta, y una cantidad de otros druidas siguió su gobierno. Cuando una especialmente dura sequía hizo que la vida del valle sufriera, buscando una forma de alterar el valle y todo lo que contenía, liberandolo de su dependencia de las volubles lluvias de la región. Ella y sus segudiores profundizaron en magias prohibidas y sacrificios de sangre a antiguos poderes de la tierra y el viento, y haciéndolo trajo una maldición tanto sobre el valle como sobre sí misma. Orlaas fue transformada en una medusa y su valle en un reino de piedra.
Sin envejecer y sin cambiar, Orlass se ha contentado con mantener el valle "a salvo" de todos los instrusos, pero una amenaza considerable del mundo exterior puede incitarle a ella y a sus "hijos" -extrañas criaturas de piedra viviente- a salir de su extraño jardín.
Marudshar [Marudshar, 11 en el mapa]: Nadie va al cañón de Maudshar. Allí, perpetuamente ensombrecias por las montañas circundantes, se encuentran las ruinas de un gran complejo templo, sus orgullosas columnas derribadas y estatuas de extraños seres desfiguradas por los vientos abrasadores. En el corazón de las ruinas se encuentra la Senda del Viajero, un gran, derruido portal que muestra las imagenes de criaturas parecidas a esfinjes y el Sacramento del Infiel, un pilar de 63 pies de alto esculpido para parecer humanos petrificados. Los nómadas de la región incluso se niegan a hablar del Marudshar, y nadie sabe que extraña fe una vez fue adorada allí. Incluso los intereses de los foráneos han sido disuadidos por los residentes del cañón, unos considerables, orgullosos por la destrucción, antinaturales leones todos de aspecto masculino, cada uno mostrando negros, ojos sin alma y la capacidad de hablar un extraño, gutural idioma.
La Cascada Septentrional [The Northern Cascade, 2 en el mapa]: En el brazo norteño de los Picos Cínicos, las nieves derretidas desembocan en el ancho Lago Vorn, cuyas cascadas establecen una serie de saltos conocidos como la Lengua de la Víbora -por la forma en que se bifurca en dos un poco más abajo de la mitad- para alcanzar el Lago Fors en la estribaciones. La Cascada Septentrional, como es conocida, es una maravilla natural, pero de poco interese para los habitantes de los Picos Cínicos más allá de eso, ya que la tierra que rodea a los lagos es rocosa y accidentada, los picos altos, y los senderos complicados incluso con buen tiempo. Las cascadas hace imposible navegar el Lago Vorn excpeto con pértigas, asi que pocos se moletan en intentarlo y flotan veleros más grandes que pequeñas canoas. La historia del monstruos del lago Vorndra fomenta el aislamiento del lago superior, una criatura que supuestamente habita en las profundidades del algo y captura y devorar intrusos que permanecen demasiado tiempo en su territorio. Los escepticos dicen que ninguna criatura acuática de cualquier gran tamaño podría vivie en el Lago Vorn, ya que no hay suficiente comida en el lago para mantenerla, ni hay medios para que lo pueda abandonar para ir a cazar en cualquier otro lugar, pero las historias persisten, con descripciones de Vorndra que van desde los draconico y serpentino a los tentacular y picudo. Incluso algunos han encontrado lo que parece ser los restos de toscos altares y ofrendas sobre la orilla de grava, quizás indicando alguna misteriosa veneración del mosntruo del lago mismo.
Valle Nowruz [Nowruz Vale, 6 en el mapa]: Asentada en un profundo valle al oeste del Cañon de la Serpiente en los Picos Cínicos existe una zona de exhuberante verdor y vida salvaje, regado y sostenido por lagos de montaña, llamado el Valle Nowruz. Es dificil de alcanzar, los pocos pasos siendo estrechos, traicioneros y vigilados atentamente, ya que el Valle Nowruz es hogar para muchos ojos, y atraviesan todo lo que ven a través de los guardiantes del valle. Un pequeño círculo de druidas, descendientes de aquellos que una vez atendieron los sagrados lugares en el Valle Nowrez y Litha, aún viven en armonía con las plantas y animales de aquí. La maldición sobre el Valle Litha ha perseguido durante mucho tiempo a su orden, llevándolos tanto a defender su propio valle y buscar un forma de romper la maldición y destruir a la traidora Orlass, esperando asi restaurar el Valle Litha a su estado natural. Desafortunadamente, la cantidad de druidas ha disminuido de forma constante a lo largo de los años, y muchos de su conocimiento se ha perdido junto con sus ancianos. Apenas hay suficientes para atener Nowruz y mantenerlo a salvo de los extranjeros, incluyendo a Orlaas y las bárbaras tribus de gnoll de los picos.
Salón Ónice [Onyx Hall, 7 en el mapa]: Escondida en las orillas del Shadis Meer en la base de una estribación de los Picos Cínicos esta la vieja mansión Salón Ónice, protegida por descuidados álamos y cicutas rodeada por zarzas. El salón -de pizarra, granito negro y mármol- una vez fue propieda de un rica familia Solku como casa de retiro, sitada lejos de los bullicios e intirgas de la vida urbana. Gran parte de la riqueza de la familia fue acumulada gracias al comercio de esclavos, y la leyenda dice que una mujer en las altas tierras lanzó una maldición sobre la familia después de que ellas, su marido y sus hijos fueran vendidos a propietarios diferentes de lejanas tierras, para nunca verse unos a otros. Por lo que todos los habitantes del Salón Ónica "habitan en cuativerio hasta que las piedras mismas ardan como un hoguera". Desde ese momento, hace más de 200 años, el Salón Ónice ha permanecido abandonado -pero no inhabitado, se dice. Aquellos atraidos a la mansión por historias de fabulosas reliquias acumulada aqui (solo una fracción de la verdadera fortuna de la familia) nunca han regresado, y los buscadores de tesoros se han vuelto cada vez más raros, a medida que las historias del salón maldito se han extendido.
Montaña Pálida [Pale Mountian, 9 en el mapa]: Entre las montañas más altas de los Picos Cínicos, la severamente escarpada Montaña Pálida se alza hasta un altura de 13500 pies. Ostentando un lugar de veneración y meido en las leyendas de aquellos que habitan las tierras circundantes -especialmente las tribus de gnoll- la composición de moteado granito de la montaña le proporciona un distintivo color más claro que los picos circundantes. Aunque la roca que conforma el pico puede ser hallada por toda la zona, la inusual concentración elevandose hacia arriba hallada en la Montaña Pálida desde hace tiempo desconcierta a los mineros. El folclore de los superticiosos gnoll y nómadas de la región explica este misterio en diversas formas, algunas alegando que la montaña esta compuesta por los huesos de una monstruosidad titánica que una vez asoló la zona, mientras que otros creen que alguna terrible bestia habita bajo el pico, drenándolo de su vida y color. En consonancia con tales siniestras historias, la montaña posee una larga historia como lugar de hazañas oscuras, extrañas adoraciones, y sacrificio, llevando en parte a la renuencia de la civilización de usurpar las tierras que caen bajo la pálida siniestra sombra de la montaña.
Río Pálido [Pale River]: Fluyendo desde las altas nieves derretidas alrededor de la Montaña Pálida, el Río Pálido fluye a través de profundos cañoes y cascadas hacia las tierras bajas, encontrandose con las Cataratas Martillo antes de fluir lejos de la montaña cerca de Kelmarane, pasando Gancho Bronce y serpentenado a través de las llanuras. Aunque el río no es demasiado amplio, es de corriente ra´pida y a veces sorprendentemente frío y profundo, especialmente en primavera, cuando se hincha con las frias nieves derretidas de los picos, proporcionandole espumosas olas y llevando a aque algunos lo apoden el "Río Cerveza".
Lago Plateado [Silver Tarn, 10 en el mapa]: Este lago de alta montañna es apodado por tanto sus tranquilas, brillantes aguas y por las antiguas minas de plata que rodean la zona, dejando varios túneles abandonados cortados en las montañas alrededor del lago. Las originales excavaciones parecen enanas, probablmente fueron el trabajo de mineros de las Cataratas Martillo. Las porciones más profundas de las minas puede que incluso aún sean viables, pero pocos exploradores se atreven a enfrentarse a los peligros de los Pícos Cínicos para investigarlo. Los tuneles de las minas puede desembocar en las profunidades de las Tierras Oscuras, lo que podría tener sentidoa dadas las historias de enanas, sombrias figuras avistadas alrededor de los alrededores del lago.
Tres Colinas [Tricehills, 21 en el mapa]: El joven pueblo granjero y comercial de Tres Colinas se asienta en un poco profundo valle entre las tres colinas a las que debe su nombre al borde de la llanura Katapeshi donde el curso del Río Pálido riega los pastizales del este y el sur. Tres Colinas es hogar para menos de 70 humanos y medianos, y es conocido por sus aceitunas, las cuales florecen en olivares a lo largo de colinas. La pequeña comunidad cultiva gran parte de su propia produccion, enviando el resto a lo largo del Río Pálido a los compradores, principalmente al este hacia el corazón de Katapesh. El humile exito del pueblo en los 12 años desde su creación han hecho de él un fácil y potencialmente tentador blanco para los incursores, y su gente se han dado cuenta de ello. El pueblo posee una empelizada central, la cual es defensible, pero es pequeña, anticuada y pobremente mantenida, patrullada solo por unos pocos guardias. La gente de Tres Colinas parecen competentes defensores, sabiendo que es solo cuestión de tiempo antes de que deban denfender todo lo que han creado.
Canón de la Serpiente [Sepent's Canyon, 5 en el mapa]: Este amplio cañón circula desde un lado de los Picos Cinicos en el sur al otro lado en el norte. Es profundo y tortuoso, con empinados, rocos lados alzandose sobre el suelo arenoso. El viento solpa y se lamenta a través de dentadas fisuras, especialmente a finales de primavera y a principios de otorño, cuando los restos de las tormentas del oeste rompen sobre los Pícos Cínicos. Puede crecer el calor en el cañón a mediodía, cuando el sol brilla directamente, y por la noche las temperaturas se desploman, pero gran parte del día esta cubierto de sombras y es relativamente fresco. Una vez fue un importante paso a través de las montañas, permitiendo a los viajeros evitar que ir hacia el este alrededor de Gancho Bronce o vadear el Río Pálido, pero con el declive de la colonización y de los esfuerzos mineros de la región y el aumento de la activida gnoll en el caón se ha vuelto menos usado por los comerciantes civilizados. Ahora los nómadas de la región hacen el mayor uso del paso, pero incluso pasan rápido, atentos a los ataques de los hombres bestia o de criaturas más extrañas.
Cañón Blanco [White Canyon, 13 en el mapa]: Serpenteando a través del corazón de los Picos Cínicos, este profundo cañón fue cortado por antiguos arroyos de montaña que desde hace mucho han cambiado sus cursos o se han secado del todo, dejando un profundo canal rodeado por altos,acantilados cortados por el viento. Solo pequeños matorrales y espgada hierba crece en las hendiduras de las rocas, la base del cañón cubierta con rocosa, brillante arena. Las sombras son profundas en el cañón, lo cual se adapta bien para sus diversos habitantes. Las tribus gnoll han controlado el Cañón Blanco durante cierto tiempo, en gran parte manteniendo su dominio y las zonas circundantes al sur de las montañas. Incluso ahora los viajeros y nómadas de las tierras altas saben que ir al Cañón Blanco significa casi seguro ser capturados y esclavizados. Solo aquellos tipos de pocos escrúpulos que tratarían con los gnoll se atreven a aventurarse en el cañón, e incluso muchos de estos turbios mercaderes nunca regresan.
Otros: Lago Vorn [Lake Vorn, 1 en el mapa], Lago Fors [Lake Fors, 3 en el mapa], los Picos Cínicos [The Brazen Peaks].
HABITANTES DE LAS TIERRAS ALTAS
Además de los habitantes de los cercanos asentamientos como Gancho Bronce y Kelmarane, las Tierras Altas Uwaga son hogar a una variedad de brutas y a menudo de las rocas criatuas que tanto viven en los profundos cañones y valles como en los altos picos de montaña.
Behir [behir]: Estos poderosos depredadores son conocidos por habitar en las estribaciones y cañones de las tierras altas, donde a menudo toman el sol, sus pieles asemejándose mucho al esquisito azul a veces hallado en esta región. Afortunadamente, los behir tienden a ser solitarios, aunque a veces uno puede encontrarse con una pareja. Los naturalistas creen que la presencia de los behir en y alrededor de los picos ha mantenido a los dragones alejados de asentarse en la zona, ya que ambas criaturas son feroces enemigos. Los protectores y batidores de las tierras altas cuentan historias de tabernas sobre behir que son diestros imitadores, usando una variedad de voces y distantes llamadas que le ayudan a traer a la presa a los huecos de los cañones y barrancos desde donde lanzar su emboscada.
Derro [derro]: Demasiadas historias sobre encuentros con estos locos degenerados circulan por todos los Picos Cínicos como para rechazarlas completamente, aunque alguna gente de las zonas circundantes aún consideran a los derro nada más que un mito. Historias de derro que viven profundamente bajo los picos son ciertas, aunque los astutos secuestradores hallan su camino hacia la superfiecie de noche a través de extractores de mina, cuevas naturales y antiguos túneles enanos. Se sabe que los derro cazan en las montañas, y por la fijación sobre las criaturas inteligentes con las que se encuentran, acechándolas de noche hasta que ven una oportunidad de robarlas o atacarlas, normalmente arrastrando a uno o más almas desdichadas a las negruras de debajo de la tierra.
Dregones [dragonnes]: Feroces, dragones leoninos con alas, varios grupos de dregones habitan aguileras aisladas entre los Pícos Cínicos. Dentro de sus inalcanzables territorios estos orgullosos depredadores se enfrentan con pocas amenazas aparte de la ocasiona tormenta de montaña. Los cazadores regularmente descienden desde los picos para cazar entre las colinas y las aisladas sabanas, a menudo regresando con presas para todo el grupo. Aunque al tanto de las temperamentales bestias, los nómadas de la región consideran avistar un dregón como un signo de fortuna venidera y a menudo sigues las sendas de los cazadores como dragones hacia rebaños de gacelas y cabras montesas. Entre las tradiciones religiosas de algunos nómadas, las hijas de los hombres sagrados aprenden el "idioma bestia" el cual de hecho es Dracónico, permitiendolas parlamentar con dregones, behir, y los raros verdaderos dragones de la montaña.
Gárgolas [gargoyles]: Tribus de gárgolas de color arena rondas las alturas de los Pícos Cínicos, anidando en riscos montañosos y en cuevas naturales donde las encuentran. Son especialmente frecuentes en los Acantilados Grises, pero puede ser halladas en cualquier lado, incluyendo el Estómago del Chacal y en extensiones a lo largo del río, donde cazan peces, animales que visitan el agua, e incluso el ocasional bote o canoa que viene río arriba. Una táctica favorita es elevar pequeñas criaturas, dejarlas caer sobre las rocas de debajo antes de descender para alimentarse de ellas.
Grifos [griffons]: Los feroces, orgullosos grifos se elevan sobre los Pícos Cínicos, a menudo a tan alta altura que son confundidos con grandes águilas o parecido. Cazan a través de los valles de las tierras bajas, especialmente el Valle Nowruz y las colinas circundantes, y anidan en los picos cercanos. Los grifos de caza a menudo atacan a los caballos y ponis de montaña (una de sus comidas favoritas) haciendo de ellos una amenaza para las pequeñas bandas que viajan a través de las altas tierras. También cazan cabras montesas e icluso gacelas y bufalos Nexianos de las llanuras que vagabundena por las tierras altas. Los otros habitantes de los picos dejan a los grifos un amplio espacio, pero los encumbrados grifos ratamente atacane humanoides a no ser que poseen adecuados ganados, y rechazan la carroña que atrae a las hienas y gnoll.
Gnoll [gnolls]: Las salvajes tribus de gnoll se cuentan entre las mayores amanezas de las Tierras Altas Uwaga. Ferzomente territoriales, los gnoll se consideran los dueños de las zonas circundantes a las tierras altas. Más detalles sobre los gnoll de la región y algunas de sus tribus más famosas puede ser hallados en "Tribus del Rey Carroñero" en este mismo blog.
Esfinjes [sphinxes]: Las historias antiguas Osirianas hablan de esfinjes en los Picos Cínicos norteños, en particular de una ginoesfinje que habita cerca de una vieja ruta comercial, quien ocasionalmente se abalanzaría sobre una caravana, o sencillmente aparecería de las sombras de la noche, pidiendo respuestas a un acertijo a retando a los viajeros con algun puzzel intelectual, y rápidamente comiendose a aquellos incapaces de ofrecer una respuesta satisfactoria. La falta de historias recientes que tieen que vez con esfinjes en la zona puede deberse a la falta de trafico a lo largo de la antigua ruta comercial, o tambien puede ser que los viajeros se han vuelto menos asutos, y nadie ha proporcionado una respuesta satisfactoria por algun tiempo.

Fuente: Pathfinder Adventure Path 2 - Legacy of Fire: House of the Beast (In the Shadow of Pale Mountain)